domingo, 30 de octubre de 2011

La serpiente y la rana.

La verdad es que ésta no es una anécdota que me haya ocurrido, sino que es una historia que contó una participante en uno de los cursos de motivación que imparto. Estábamos hablando de la importancia de saber qué conductas estamos motivando, consciente o inconscientemente en las personas que nos rodean.

En esas estábamos cuando Nuria contó la historia de la serpiente y la rana. Más o menos es como sigue.

Un hombre estaba paseando por la orilla de un río, cuando vió una serpiente que tenía apresada en la boca una pobre rana. El hombre apiadándose de la ranita, con un palo se la quitó de la boca. La serpiente trató de atacarle, y el hombre, al verse en peligro, le tiró para entretenerla, lo que tenía más a mano en ese momento: su petaca llena de bourbon. Después, salió corriendo.

Al día siguiente, paseando el mismo hombre, por la orilla del mismo río, salió a su encuentro la misma serpiente, pero esta vez no tenía en la boca una rana, sino dos.


Saludos,
Raúl.
P.D: gracias Nuria por la historia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario